UN BESO MAS

Aquel día, al caer el ocaso,
nos dimos el primer beso
que encendió en nuestros cuerpos
el fuego de la pasión.

¡Un beso mas!
me rogaban vuestros labios candentes
al deslizar los míos por vuestro cuello
y sentir el aroma cautivante de tu piel.

¡Un beso mas!
me suplicaban vuestros labios apasionados
al deslizar los míos por vuestra espalda
y cubrirlo de besos frenéticamente.

¡Un beso mas!
exclamaban vuestros labios fervorosos
al deslizar los míos por vuestros pechos
y besarlos al compás de tus suspiros.

¡Un beso mas!
me demandaban vuestros labios fogosos
al deslizar los míos por vuestro ombligo
y besarlo con ímpetu y pasión.

¡Un beso mas!
me imploraban vuestros labios ardientes
al deslizar los míos por vuestro vientre,
y embriagarme de éxtasis y pasión.

¡Un beso mas!
me pedían vuestros labios vehementes
al deslizar los míos por vuestros muslos
y besarlos delicada y apasionadamente.

¡Un beso mas!
me solicitaron vuestros dulces labios
hasta que el fulgor de la luz del alba
ilumine nuestros cuerpos
y sea testigo de nuestro Amor.

Copyright © Mayo 2005 - Fernando Rogelio S. A.